La Asamblea de periodistas de la Asociación Manuel de Unciti se celebra en Huesca

Una treintena de profesionales de la información llegados de distintas partes de España han visitado la capital altoaragonesa y el castillo de Loarre

Ignacio Rivarés Javierre
27 de Junio de 2023
La Asamblea de periodistas de la Asociación Manuel de Unciti se celebra en Huesca

Además de las chicas que han participado en el Campeonato de España de Gimnasia, por las concurridas calles de Huesca se ha podido ver este fin de semana a un nutrido grupo de periodistas. Eran los miembros de la Asociación Manuel de Unciti (AMU), una treintena de cuyos integrantes, acompañados de familiares y amigos, han visitado los días 24 y 25 la ciudad para participar en la asamblea anual de la institución.

El evento tuvo lugar el sábado día 24 en el restaurante El Caserío Aragonés y estuvo precedido por una enriquecedora visita a la catedral y al museo diocesano. Allí, de la mano de Susana Villacampa, directora del museo, el grupo pudo admirar las (para muchos todavía desconocidas) maravillas de la seo oscense, empezando por el impresionante retablo en alabastro de Damián Forment, la capilla del Santo Cristo, o el Salón del «Tanto Monta», en donde estos días puede verse una parte de la exposición «Signos».

EUCARISTÍA Y HOMENAJE

Antes de la visita a la catedral, los miembros de la AMU celebraron una Eucaristía en memoria de la persona que da nombre a la Asociación, el sacerdote y periodista donostiarra Manuel de Unciti (1931-2014). La ceremonia permitió rendir tributo también a otro presbítero: el oscense Rafael Ciria, colaborador espiritual desde la distancia en la labor de aquel al frente de la residencia «Azorín» de Madrid, dedicada a la formación de periodistas cristianos. A sus casi 92 años, y pese a los achaques, el P. Ciria asistió emocionado a la misa, que finalmente pudo concelebrar junto al capellán del monasterio de Las Miguelas, P. Santiago Villacampa.

La Residencia «Azorín» para estudiantes de Periodismo fue fundada por Manuel de Unciti en 1964, y por ella pasaron a lo largo de cuatro décadas varios cientos de estudiantes de ciencias de la información. Muchos de ellos acabaron desempeñando luego importantes puestos en relevantes medios de comunicación nacionales. Un puñado de esos estudiantes, varios de ellos oscenses, llegaron a la residencia gracias al P. Ciria, después de cursar sus estudios de Secundaria y el Bachillerato en la antigua Universidad Laboral de Huesca, hoy instituto Pirámide.

El pasado mes de marzo el Ayuntamiento de Madrid quiso reconocer la labor de la Residencia Azorín y de su impulsor, el P. Unciti, colocando una placa en el lugar donde se levantaba el emblemático chalet de la calle Rosa Jardón. El magisterio de este sacerdote, periodista y misionero –se puede leer en ella—«inspiró a cientos de profesionales de la información bajo la divisa: “La verdad, aunque duela”».

La AMU concluyó su encuentro con una visita guiada a esa joya del románico civil que es el castillo de Loarre. Ni que decir tiene que Loarre tampoco defraudó y que, si bien algo acalorados, los participantes en la Asamblea pudieron regresar a sus lugares de procedencia —Madrid, Zaragoza y País Vasco, sobre todo— plenamente satisfechos de la acogida, atención y gastronomía del Alto Aragón.