"Cuando se acerca San Lorenzo, hay que presentar la San Lorién". Son las primeras palabras de David Félez Sola, que hace trece años fundó L'Artesana Cervecería, primero en la calle Ramiro el Monje y desde hace un lustro en la Plaza de San Pedro.
El empresario hostelero se refiere a la edición 2025 de esta iniciativa que ya es tradición entre sus clientes. "Llevamos ya trece años haciéndola. Como tenemos muchas cervezas con muchos sabores, algunas con frutas, dijimos que por qué no va a haber una cerveza elaborada con albahaca. Hablamos con Fernando Borruel, de Pirineos Beer, de Hecho, se puso a la faena, cogió albahaca de Huesca, la subió y la probó. La probamos, nos gustó y la lanzamos. Todos los años tenemos esta cerveza aprovechando el ambiente laurentino".
Explica David Félez que se trata de una "pils, un estilo muy básico. Una rubia muy fresca, muy bebible, y se diferencia en que lleva es un poco de albahaca tanto en la fermentación como en el aroma que se pone luego. Lo único que le pedí a Fernando es el resultado que quería y él me lo ha conseguido. Tiene un sabor tradicional de la cerveza, con un ligero toque de amargor que le da el lúpulo y, en este caso, tiene un pequeño toque de albahaca presente aunque no muy potente. Se trata de que no se apodere. Le da un frescor extra y un aroma que también aporta".
Recuerda los orígenes de L'Artesana Cervecería y la causa de su creación. "Nos gusta la cerveza y, cuando descubrimos que había muchas cervezas diferentes y no sólo las comerciales que nos sirven en los bares, que había mucha gente que hacía cerveza a nivel artesano, vimos que había un hueco que podíamos cubrir. Entonces había menos gente, ahora hay mucha más. Era un hueco necesario en la ciudad. No sólo fuimos los primeros en Huesca, sino en Aragón".

Afirma David Félez que las cervezas artesanas "han mejorado mucho desde que abrimos en el 2012. Ha mejorado porque se ha ido cerrando el mercado y han quedado los buenos. Había gente que igual no era tan profesional, ahora los que las hacen son muy profesionales y lo hacen todo poniendo mucho esmero y calidad en los ingredientes que se emplean y en el proceso".
Ahora mismo, la cervecería de la Plaza de San Pedro cuenta con más de un centenar de referencias artesanales con sabores y aromas que hace años hubiéramos considerado inconcebibles, muchas frutas y productos próximos y exóticos para escoger de acuerdo a nuestras preferencias, pero en el centro de todo la San Lorién, con su marca y su diseño diferente cada año, incluso con ese atractivo de ese centenar de chapas especiales que seducen a los coleccionistas.
