La V Movida Arcadia ha dado inicio a su Jornada Técnica con la ponencia de Sílvia Doménech, directora general de La Fageda, un "proyecto social de referencia nacional e internacional en el ámbito de la economía social". Fundada en la Garrotxa (Girona)", La Fageda cuenta con "43 años de vida ahora" y nació con la "voluntad de generar oportunidades laborales para personas con enfermedad mental", comenzando a atender también, al cabo de poco tiempo, a personas con discapacidad intelectual.
Arcadia, entidad anfitriona, se "inspiró en este modelo" hace más de 30 años para fundar su Centro Especial de Empleo. Doménech describió a ambas como "entidades primas hermanas", dado que "hacemos lo mismo en distintas regiones y con la misma intención".
La filosofía central del proyecto fue impulsada por su fundador, el psicólogo Cristóbal Colón -quien llegó a Cataluña procedente de Zuera-, después de "descubrir a los 70 lo que ocurría en los entonces llamados manicomios".
Basándose en una "visión humanista de base y muy clara", el proyecto se sustenta en la convicción de que "el trabajo podía ser un elemento rehabilitador y una herramienta para insertar y acompañar a las personas que lo han tenido más difícil a lo largo de su vida".
A lo largo de sus 43 años, ha explicado Sílvia Doménech, La Fageda ha ido creciendo "hacia adentro y un poco para afuera", reconociendo que entidades como esta "necesitan de muchas actividades económicas para garantizar que cada persona encuentra su sitio y su itinerario".
Tras iniciar con "actividades para terceros" como jardinería e "industria religiosa", llegaron a una finca "preciosa" que se encuentra ubicada dentro del parque natural de la zona volcánica de la Garrotxa. Allí desarrollan una buena parte de sus actividades, incluyendo las ganaderas, agrícolas y elaboración de productos de alimentación.
El centro produce yogures, postes, helados y mermeladas, elaborados por las "personas del Centro Especial de Empleo y de la empresa de inserción". La actividad económica principal, centrada en los productos de alimentación, lleva "30 años" y ha logrado que La Fageda haya llegado a ser "la segunda marca de Cataluña de yogures". Además de la dimensión económica, han diversificado en "servicios de atención a las personas a nivel de vivienda,ocio y tiempo libre".
Al reflexionar sobre el impacto social del proyecto, Doménech ha indicado que, sin La Fageda, "seguramente una parte de las personas estarían en su casa". Al ser "un centro especial de empleo de especial dificultad, la inserción en la empresa ordinaria es más difícil".
Respecto a la evolución de la percepción social de la enfermedad mental grave, la directora general ha estimado que todavía "queda mucho trabajo por hacer".