Los dominios esquiables de Cerler y Formigal se han visto gratamente sorprendidos durante el día de hoy por la visita de Papá Noel, que no conforme con repartir regalos enre los esquiadores también ha decidido deslizarse por el precioso manto blanco de las estaciones.
De hecho, ha sido una bonita mañana de esquí para los primeros practicantes que adelantan uno de los periodos más frondosos de la temporada, especialmente conforme avanza hacia el nuevo año y el camino conduce indefectiblemente hacia los Reyes Magos.
Papá Noel ha estado simpático, complaciente con los niños, sonriente a los padres, amable con los de una cierta edad, animando a los trabajadores de la estación. Al que menos, le ha obsequiado con su aliento, que no es poco en los tiempos que corren. A los que más... Ellos sabrán.
Aramón, que integra las estaciones de esquí en el Pirineo aragonés de Cerler, en el Valle de Benasque y Formigal-Panticosa, en el valle de Tena, y Javalambre y Valdelinares, en el Sistema Ibérico turolense, representa la mayor superficie esquiable de España.
Con 22 años cumplidos desde que brotara para impulsar el desarrollo económico y social de las comarcas en las que opera mediante la creación de una oferta de turismo de esquí y montaña moderna e innovadora, la evolución ha adaptado los centros a las demandas de las nuevas tendencias de esquí, de modo que hoy no son sólo lugares para el depore, sino para un ocio integral.
En un año que presume ser bueno por el acompañamiento del manto blanco, Aramón tiene dispuestos 77 remontes con una capacidad de transporte de casi 100.000 esquiadores/hora, hacia las 241 pistas de todos los niveles. Más de 1,2 millones de esquiadores se han congregado en las últimas dos campañas, atendidos por 900 empleos.
En total, 294 kilómetros esquiables, con más de 115 kilómetros innivados por 1.250 cañones, que garantizan una excelente nieve durante toda la temporada. La maquinaria líder del turismo invernal ya está en marcha y bendecida por Noel.