"Miopía, la nueva pandemia" por Nunila Gómez de Liaño ha sellado un hito dentro del 135 aniversario de Óptica Arenas, una conferencia extraordinariamente interesante en la que la optometrista especializada en miopía en niños ha volcado sus conocimientos y experiencia para ilustrar la importancia de la salud visual. Como explicaba Carmen Aineto Arenas, quien la ha presentado, es una problemática global de gran relevancia en la actualidad.
Nunila Gómez de Liaño ha explicado el funcionamiento del ojo, compuesto por lentes y mecanismos que permiten percibir las imágenes enfocadas, y cómo la alteración de alguno de estos parámetros puede producir que las imágenes se perciban desenfocadas, siendo necesaria la corrección óptica mediante gafas o lentes de contacto para solucionar esta borrosidad.
Cuando ante estas alteraciones nos encontramos frente a un ojo miope, el verdadero problema ante el que nos enfrentamos radica en las posibles patologías asociadas que estos ojos pueden llegar a desarrollar, tales como retinopatías, glaucoma o cataratas, afectando al 50-70% de miopes con alta miopía según el “Instituto Internacional de Miopía”, lo que lo convierte en un problema de salud mundial.
Nunila Gómez de Liaño agrega que las enfermedades derivadas de la miopía guardan una estrecha relación con la cuantía, viéndose incrementado el riesgo de padecerlas según va aumentando la miopía, repercutiendo en mayor medida en los ojos con miopía magna.
Respecto a los síntomas, ante los posibles signos de alarma ha señalado "la dificultad para ver a distancia lejana, molestias oculares, parpadeo excesivo, enrojecimiento ocular, dolores de cabeza, inseguridad o dificultad para realizar ciertas actividades deportivas entre otros”, a pesar de la dificultad para detectarlos en muchas ocasiones, lo que hace que sea muy recomendable hacer revisiones visuales periódicas.
En cuanto a los factores que influyen en su desarrollo, hay algunos que no se pueden alterar como son la edad, el sexo, los antecedentes de los progenitores o la etnia; sin embargo, hay otros factores sobre los que sí podemos actuar, como el tiempo que el niño pasa al aire libre o el tiempo y las distancias empleadas para realizar tareas de cerca, "no tanto las pantallas o los móviles como las distancias a las que se utilizan” como desvelan muchos estudios publicados. Otros aspectos como la iluminación, el contraste y la alimentación también tienen su peso.
La edad de aparición de la miopía es determinante en el pronóstico, ya que "cuanto más temprana sea la edad del niño, posiblemente peor será el pronóstico”.
Todo esto requiere un buen asesoramiento y seguimiento por parte de un profesional de la visión.
Los datos se convierten en inquietantes cuando se estima que en el 2050 el 55 % de la población mundial será miope, estadísticas que hacen que sea imprescindible el abordaje de la situación.
“A día de hoy no podemos evitar que aparezca la miopía, pero sí sabemos cómo controlar en un porcentaje elevado su evolución”.
Nunila Gómez de Liaño ha aludido a los tratamientos disponibles actualmente para controlar la miopía: lentes de contacto blandas, ortoqueratología, lentes especiales para gafas y tratamiento farmacológico tópico, con posibilidad de combinaciones entre ellos, encontrándose la eficacia de estos tratamientos aludidos entre el 50-60 % de ralentización en la evolución de la miopía.
Respecto a la selección del plan de acción más adecuado "Hay que hacer un tratamiento personalizado porque cada niño es distinto y cada caso hay que valorarlo de manera individual". Hablar con los padres y con el niño tras el estudio del caso es imprescindible para la correcta selección del tratamiento y para el éxito en la realización del mismo.
Por todo esto resulta altamente recomendable realizar revisiones visuales a partir de los 3 años en las que se pueden detectar anomalías oculares, entre ellas la miopía, pero también existen otras alteraciones que pueden condicionar el correcto desarrollo visual, por lo que debemos confiar en el profesional de la visión para asegurarnos la adecuada evolución de la salud visual de los niños y de los jóvenes.