La Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de la Comandancia de la Guardia Civil de Huesca ha concluido una investigación que ha llevado a la detención de tres personas e investigación de otras tres, todas ellas vecinas de la comarca del Alto Gállego e implicadas en la destrucción de las clavijas de “Cotatuero” en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Los detenidos y los investigados están acusados de un delito de daños, en diferentes grados de participación, actuando todos ellos de manera coordinada.
Los hechos ocurrieron cuando un grupo de individuos destruyó una docena de clavijas que, desde hace más de 100 años, facilitaban el paso por un muro rocoso en la ruta de “Cotatuero”, una zona emblemática del parque que es frecuentada por excursionistas y montañeros.
La investigación comenzó el 6 de mayo, después de que se publicaran en redes sociales unas imágenes en las que se mostraba el corte de las clavijas. Ante esta situación, el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido presentó una denuncia formal, lo que permitió a la Guardia Civil iniciar la investigación.
El Equipo Territorial de Policía Judicial (ETPJ) de la Guardia Civil de Jaca, con el apoyo de agentes de Seguridad Ciudadana de Torla, especialistas del GREIM de Boltaña y el SEPRONA, inspeccionó la zona y verificó que efectivamente las clavijas habían sido destruidas, lo que obligó a cerrar la vía de acceso para prevenir posibles accidentes.
Según los agentes, los implicados actuaron de manera planificada. Dos de ellos se encargaron del transporte, utilizando dos vehículos para trasladarse desde Sabiñánigo hasta la pradera de Ordesa. Posteriormente, tres de los implicados escalaron hasta las clavijas, donde procedieron a cortarlas.
Durante este acto, grabaron un vídeo en el que ocultaron sus identidades y luego difundieron las imágenes en redes sociales, como una forma de reivindicación.
Al mismo tiempo, otro de los implicados colocó carteles en las inmediaciones, tanto en la zona española como en la francesa del parque, advirtiendo a los usuarios sobre el daño causado y el riesgo de acceso a la ruta debido a la destrucción de las clavijas.
La Guardia Civil continuó con su investigación, recabando información y analizando pruebas que permitieron identificar a los responsables. Finalmente, el 1 de julio, fueron detenidos tres hombres, todos ellos de nacionalidad española, como presuntos autores de un delito de daños.
Además, una cuarta persona fue investigada por ser la encargada del transporte de los autores materiales. Posteriormente, el 7 de julio, dos mujeres más fueron investigadas: una por el transporte de los autores materiales y la otra por colocar los carteles reivindicatorios.
Una vez completadas las diligencias, los resultados de la investigación por el delito de daños fueron remitidos al Juzgado de Instrucción Único de Boltaña, que continuará con el proceso judicial correspondiente.