El encuentro Caminando por las Nubes en su segunda edición ha dejado un muy buen sabor de boca con unos números muy positivos de asistencia tanto de profesionales especializados en el funambulismo como de público que llenó los espectáculos del festival
Los funambulistas descendieron del alambre, pero su vibración permanece así como todo lo vivido la pasada semana. La treintena de profesionales venidos de Francia, Estados Unidos, Bélgica, Italia y del resto de España – País Vasco, Comunidad Valenciana, Cataluña, Andalucía, Castilla y León, Galicia, Comunidad de Madrid y Aragón -, dejaban Angüés tras una semana en las nubes compartiendo formación, risas, abrazos y horas y horas encima de los cables. Una semana donde los lazos se tejieron más allá de la técnica de circo, creando comunidad y acercándose al territorio y a sus habitantes, dos de los principales objetivos de la organización.
Serendipia y Nostraxladamus, entidades que soñaron con la realización de este encuentro y quiénes lo han podido llevar a cabo por segundo año consecutivo, mostraban su satisfacción. Los números de esta segunda edición hablan por sí solos. Una treintena de artistas profesionales venidos de cinco países distintos y alrededor de 1.800 espectadores en los tres espectáculos realizados. "El sector del funambulismo comienza a conocer a Angüés como un lugar de referencia del equilibrismo a nivel internacional", indican.
Caminando por las Nubes dio comienzo con el espectáculo inaugural en la ciudad de Huesca el 30 de Abril dónde alrededor de mil doscientas personas recorrieron los diversos escenarios para ver las acrobacias de los artistas venidos de Francia, Bélgica, Cataluña y Aragón.
Entre risas, asombro y poética se disfrutaron de propuestas sobre la cuerda floja, el trapecio, el cable tenso, la slack-line o una imponente estructura de funambulismo a siete metros de altura. La semana continúo con la formación profesional que contó con dos docentes de excepción, Nathalie Good – equilibrios sobre cable tenso - y Olivier Roustan – funambulismo en altura -, dos eminencias en sus respectivas disciplinas.
Ambos artistas asentados de Francia, aunque el origen de la primera es estadounidense, ofrecieron generosamente sus conocimientos dando lugar a una formación excepcional en el municipio de Angüés.
A mitad de semana se pudo disfrutar en el salón social de Angüés del documental Man on Wire, ante la atenta mirada de una treintena de residentes del municipio asombrados ante las hazañas de Philippe Petit.
El segundo fin de semana comenzó con una jam session de equilibrios en el claustro del monasterio de Casbas de Huesca. Seis estructuras de equilibrios y un mástil chino esperaban a los alrededor de doscientos asistentes que tomaron su sitio en los huecos sobre el césped dentro del claustro, entre sus columnas y los pasillos que lo rodean.
Los artistas participantes en la formación profesional improvisaron sus acrobacias durante más de una hora al ritmo de la música de Sofía Díaz y Víctor Palacín quiénes en un amplio y variado espectro musical interpretaron la música con el violín, el piano, la kora, la kalimba, el shruti o el djembe creando un atmósfera muy especial inundando cada rincón del claustro.
El sábado por la mañana alrededor de 150 se acercaron a Bandaliés a conocer de primera mano la técnica del equilibrismo aprovechando el taller abierto realizado por la artista italiana Valentina Marchioro. Pequeños y mayores se subieron a las estructuras y probaron a caminar por el alambre, sembrando la semilla del circo en su interior.
El encuentro llegaba a su fin con el espectáculo del sábado por las calles de Angüés. En el espacio Demba Choliba, que había acogido toda la semana a los participantes al encuentro, comenzó el nuevo espectáculo de la compañía Nostraxladamus que había estado de residencia artística los dos meses anteriores trabajando en esta nueva creación.
Tras la lluvia, se trasladó toda la programación al pabellón aderezada de la brillante y divertida cómica Patricia Coronas. Allí se pudieron disfrutar de los espectáculos de la artista francesa Marie Vanpoulle sobre el cable, el también francés William Thomas en una improvisación de acrobacia y danza y del estreno del nuevo número de la compañía Alodeyá con malabares de luz.
Al término de la última actuación circense, dio comienzo el concierto de Bufa la Craba grupo de música de la Comarca de la Hoya precedidos de la música portuguesa Camila quién emocionó a todos los asistentes cerrando su concierto con una versión acústica de una canción que habla sobre el funambulismo.
Los organizadores expresaron su agradecimiento a las instituciones que han hecho posible el proyecto por su apoyo y confianza en el mismo: Diputación Provincial de Huesca, Ayuntamiento de Huesca, Ayuntamiento de Loporzano y Ayuntamiento de Angüés. Expresaban también su deseo de continuidad para el año que viene con la intención de continuar asentando la cita como un referente a nivel europeo.
La segunda edición de Caminando por las nubes ha sido un éxito y ahí, en las nubes, siguen sus organizadores proyectando ya el encuentro del año que viene.