Los cuentos siguen presentes en las historias personales, en la memoria y en la vida de quienes los escucharon y contaron, por mucho tiempo que haya pasado. Así se ha puesto de manifiesto este lunes en la Rey Ardid de Huesca, donde sus residentes han recordado títulos, personajes y canciones durante la actividad organizada por las bibliotecas municipales con motivo del Día de los Abuelos y coordinada en esta ocasión por la Ramón J. Sender.
En este espacio se ha presentado el vídeo narrado por los usuarios infantiles de la biblioteca, que pusieron voz al cuento “La jaula de la señora Clotilde”, escrito por Indy García e ilustrado por Sol Ruiz. La proyección ha despertado entre los mayores una cadena espontánea de recuerdos: algunos textos que escucharon de niños, otros que contaron después a hijos y nietos, y canciones que aún hoy recuerdan. “Mi favorito era el de Los siete cabritillos”, ha señalado una de las residentes. “Así lo contaba mi madre, y yo igual a mis hijos”, ha añadido otra, tras cantar el estribillo de Garbancito.
En el acto han participado Cristina Bergua y Alicia Rey, por parte de las bibliotecas, así como la trabajadora social María Paúles y la terapeuta ocupacional Iliana Blasco, ambas por parte de la residencia.
El vídeo forma parte de una iniciativa que las bibliotecas municipales repiten cada año con el objetivo de reconocer el papel de los abuelos en la sociedad y reforzar los lazos entre generaciones. Puede verse en el canal de YouTube de las bibliotecas municipales de Huesca, y en ambas sedes -Ramón J. Sender y Antonio Durán Gudiol- ya está disponible una selección especial de libros infantiles protagonizados por personas mayores.
Lejos del homenaje rutinario, la actividad ha dejado constancia de algo esencial: que los cuentos no se olvidan, y que en la memoria de los abuelos siguen teniendo un lugar propio, vivo, lleno de significado.