La urgencia de un enfoque multidisciplinar para el rescate del patrimonio de Huesca

La Jornada de Studiosi y Osca XXI demanda una visión global del patrimonio tras haber sido destruido en una parte muy sustancial

DH
30 de Noviembre de 2022
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Fray Manuel Anglés expone la importancia del convento-colegio de La Merced de Huesca

Un paradigma de la relación de la ciudad con su cultura: "¿Cómo hemos podido llegar hasta aquí?" Es la pregunta que ha formulado Julia Justes Floría, arqueóloga, en el coloquio sobre "El patrimonio cultural de Huesca y el de la Universidad de Huesca (a propósito de la urbanización del solar de la Merced?" en el salón de la Asociación de Vecinos de San Lorenzo, en las jornadas organizadas por la Federación de Asociaciones de Vecinos Osca XXI, Studiosi pro Universitate Sertoriana y Osce Biella. Ha sido este martes un encuentro especial, porque entre el público historiadores, arquitectos y periodistas han participado activamente para poner blanco sobre negro la ingente destrucción patrimonial. Ejemplos como la propia Merced, el hospital de Nuestra Señora de la Esperanza, San Juan de Jerusalén, la imprenta de la Universidad, los conventos en torno a ésta, San Francisco junto a los Porches, una parte del Seminario Conciliar... Y, con modestia impropia de su condición de directora del Museo Diocesano y sus vastos conocimientos, emerge la propuesta de Susana Villacampa Sanvicente: el rescate del patrimonio de Huesca requiere un enfoque y un equipo multidisciplinar.

La arqueóloga ha asegurado que el primer paso es definir qué es patrimonio, amparada en la legislación de 1999. "El patrimonio cultural está formado por los testimonios fundamentales de la trayectoria histórica de un grupo humano, entendiendo por grupo humano una región, un pueblo, una ciudad, una comarca y un país. Y este patrimonio es común, todos tenemos el derecho de preservarlo para los demás, para los que vienen detrás de nosotros. Y lo conforman construcciones, tradiciones, historia, arte, el acento, la forma de entender la vida... Todo eso queremos conservarlo".

Ha mostrado el estado actual del Seminario. "Es una mentira como un una casa, porque ahora hay una serie de agujeros en el techo, sobre todo en la parte exterior. Casualmente, no en las partes que quieren tirar. Un edificio de estas características no se construye en un único momento, sino que hay distintas fases constructivas. Hay una fase previa la 0, que son aquellos movimientos anteriores a la construcción del Seminario Conciliar, que en estos momentos conocemos dos. La iglesia de la Santa Cruz y una torre medieval que ha sido engullida por edificios".

Ha contextualizado la también miembro de la Plataforma por la Conservación del Seminario su fundación y evolución, con la certeza de su carácter conciliar en 1580 junto a las anteriores Casas de Montearagón o el Colegio Mayor Santa Cruz, y luego el ala de General Alsina. Ha recordado a Valentín Carderera y su gráfica expresión de la Huesca decadente de mediados del siglo XIX, el embellecimiento propiciado por Regiones devastadas que sólo ocultó sus características primigenias. Y la tentativa institucional de eliminar incluso el torreón de levante, que es Bien de Interés Cultural.

Julia Justes lamenta que "la ciudad no valora su patrimonio cultural. Acepta los dirigentes políticos y técnicos sin cuestionarlos. Estos dirigentes ni entienden ni quieren recuperar. Sólo priman los criterios estéticos desde la perspectiva del siglo XXI y los económicos". No alude sólo a los políticos, también a los técnicos. Pero quiere ver una luz de esperanza, y es la movilización popular con el "Abrazo al Seminario".

Para el futuro, recomienda reivindicar nuestro pasado.  "No son aceptables mutilaciones impuestas sin criterios. Hemos de tomar conciencia de nuestra riqueza cultural o nos vamos a diluir en la globalización". Y la posibilidad de la diferencia está en ser siempre diferentes.

PABLO CUEVAS: HUESCA, CIUDAD-UNIVERSIDAD

Pablo Cuevas, presidente de Studiosi pro Universitate Sertoriana, ha reivindicado la necesidad de fijar un símbolo que proyecte la existencia del Convento-colegio de la Merced en el lugar donde se está construyendo. "Podría ser una placa, pero hay tantas placas en Huesca... También se sugirió que fuera una figura de poliexpán al estilo de un capitel romano de manera que dé que hablar y nos haga sentirnos identificados con la historia de nuestra ciudad".

"Vamos a profundizar en las razones de tanta pérdida sistemática de patrimonio en la ciudad de Huesca. La exposición de fotos colocada en este local da idea de lo que fue el convento". El profesor ha esbozado el conjunto de la herencia de la Universidad de Huesca, comenzando por los fundamentos jurídicos, las condiciones del traspaso de los bienes al Instituto y el estado actual de los derechos. "Hicimos unas excursiones a sitios emblemáticos De la ciudad: Montearagón, San Martín de la Baldonsera, la virgen de Salas y las localidades de su distrito. Hay que recordar la magnífica conferencia de Bizén D'O Río porque es impresionante la cantidad de profesores y alumnos, y los rectores que dio también Bolea a la Universidad. Pero hay cientos y cientos de poblados y despoblados que dieron alumnos. Es la universidad del Pirineo, y me refiero también a las Cinco Villas, al este de Navarra y buena parte de Lérida, el valle de Arán incluida".

¿Cómo hemos podido llegar a esta destrucción del patrimonio. Mostró el libro "La Universidad de Huesca entre la memoria y el futuro" de Macario Olivera, donde explica perfectamente  su realidad. Y hace una "comparativa entre las universidades de Alcalá y Huesca. Alcalá tenía 1.200 vecinos. Madrid se llevó la universidad y la biblioteca. El contraste era enorme. Una ciudad pequeña y otra enorme. Se vendieron el patrimonio y la gente veía que estaban desmontando el Colegio de San Ildefonso, los colegios mayores, y la gente se unió en los Condueños, comerciantes de Alcalá que sacaron dinero y con el apoyo del arzobispo para ir al señor que había comprado todos esos edificios y los preservaron para que en un futuro volviera a haber universidad. Y han conseguido crear una universidad que funciona y progresa maravillosamente. La ciudad tenía 1.200 y Huesca siete u ocho mil habitantes"

"Sólo tenemos que ver lo que ocurrió con el Colegio de la Merced, que se hizo a espaldas de la ciudad, desmontando los elementos igual que querían hacer en Alcalá. Se utilizaron para embellecer casas particulares. Puede haber diferentes dinámicas respecto a este asunto".

Otro asunto muy grave fue cuando se hizo el museo en lo que había sido la universidad y el instituto, y "se desmanteló el Paraninfo de la Universidad, del 68 al 73. Era la sala más importante que había con mucha diferencia de Huesca. Muy bonita además porque están colgados todos los cuadros allí. En estos momentos, la sala más importante es la del Instituto, bastante más que la de la campana de Huesca que se enseña a los visitantes. En el plano jurídico, hay algo muy importante, que es la herencia del Instituto Ramón y Cajal de Huesca. En 1864, el director del instituto fue al registro de la propiedad a registrar los siguientes bienes: el edificio de la universidad, el colegio mayor de Santiago, el Colegio de San Vicente y alguna otra propiedad, fincas, etcétera. Se reconoció que esos edificios pertenecían a la Universidad de Huesca por herencia. En el 36, el llamado la España nacional desalojó el instituto en el que se puso una prisión militar que luego se mantuvo durante los años cuarenta y quedó en muy malas condiciones. Al instituto se le prometió que se iba a hacer unas inversiones para volver allí, pero ya no pudo ser. De todas formas, el director del Instituto, en 1947 volvió a ir al notario y el notario certificó que según el registro los edificios que acababa de decir pertenecían al instituto".

Pablo Cuevas ha resumido con amargura la realidad. "Nos hemos cargado la mayor parte del patrimonio. Menos mal que el museo y los dos colegios siguen estando. Yo creo que teníamos que ir a una idea de Huesca, ciudad-universidad. Y que tendría que ser desarrollada por el pueblo. No sé si es muy utópico, pero por asociaciones de barrio, por nosotros, que lo hemos sacado adelante con los Studiosi, y habría que conseguir que fuera apolítica, que tanto los de izquierdas como los de derechas como los de centro entiendan que esto es de Huesca, como hacen en Teruel o en Soria. Vamos a apoyar todos esta idea. Algo muy interesante es la biblioteca del Seminario que es la única independiente que conservamos de la universidad y el obispado tiene interés en invertir en esto. Tenemos uno de los seminarios más antiguos".

Ha agregado que el edificio de la universidad, "en el 36, era un conjunto magnífico: el paraninfo, el claustro, todavía era un sitio donde se daban clases, una de las mejores bibliotecas antiguas de España, uno de los fondos universitarios más completos. Se tendría que volver a utilizar ese edificio para que estuvieran los fondos de la universidad. Los están custodiando maravillosamente la biblioteca y en el Archivo Histórico Provincial. Pero perfectamente podía estar el archivo de la Universidad en el edificio de la Universidad y que lo gestionara el archivo, y lo mismo con los libros. Y también sería bonito que allí se dieran clases".

BIZÉN D'O RÍO: LA SEMANA SANTA OSCENSE NACE DE LA MERCED

Bizén D'o Río, de Studiosi pro Universitate Sertoriana y cronista oficial de La Hoya, ha afirmado que el Colegio de la Merced va más allá de su rol de convento y de colegio. "Es un crisol de la cultura y las tradiciones oscenses sobre todo". Ha enmarcado la edificación de los mercedarios en su barrio, en la Edad Media y la época visigdótica junto a la capilla del oscense Laurencio, y expuesto el apoyo por decreto real para su erección con la donación del espacio. Era tan generosa la superficie que abarcaba distritos de San Lorenzo, San Pedro y San Martín y una puerta de Alquibla que se correspondía con la Correría ".

La Cofradía ha sido la más importante de la ciudad, agregada a la Archicofradía Romana de los 12 apóstoles. "Las primeras Semana Santa oscense salen de la Merced con la Virgen de la Soledad. Podemos decir que la Semana Santa nació de La Merced, por su anexión a la Sertoriana. El director del Instituto acompaña a obispo, Archicofradía y al alcalde en la procesión del Santo Entierro".

Finalmente, se ha extendido en la figura de Juan de Molina, un gran rescatador de cautivos (el cuarto carisma de los mercedarios) que en Túnez y Árgel recuperó para la cristiandad a 86 y 114 personas respectivamente. "Un gran fraile muy vinculado a ciudad de Huesca".

FRAY MANUEL ANGLÉS: EL PATRIMONIO ES ALGO VIVO

El secretario general de la Orden de la Merced, Manuel Anglés, ha recordado la confluencia de sus dos condiciones: de Alcañiz y mercedario. Alcañiz, donde se gestó el privilegio de Pedro IV el Ceremonioso de la erección de la Universidad de Huesca en 1354. Y, como fraile, por participar en la historia de "uno de los conventos más importantes de la orden de la Merced", y singularmente desde 1578 con la bula de Clemente XIII para ejercer de colegio. Antes de su intervención, Pablo Cuevas, que residió 19 años en Alcañiz donde coincidió con el fraile, le ha obsequiado un libro en nombre del Ayuntamiento de Huesca sobre la Universidad Sertoriana. Publicado por el Instituto de Estudios Humanísticos de Alcañiz, editor de los libros de la Universidad de Huesca con la Universidad de Lisboa y la Universidad Autónoma de México, en la primera edición con la colaboración de Ayuntamiento oscense, Instituto de Estudios Altoaragoneses y Catedral.

Ha vestido el hábito por respeto a la cercanía a ese lugar que fue convento-colegio hasta 1835 en que se data el último listado de frailes. Seis sacerdotes, 6 colegiales y 5 legos. "Es el recuerdo de que unos años antes hay un decreto del rey Carlos III de reducción de frailes por conventos y a Huesca, en que había veinte, le dice el Consejo de Castilla que ha de reducir a ocho y que fuera sacerdotes. Se perdía la condición de colegio. Para ser colegial en Huesca, había que pasar los exámenes previos en la orden, no se podía venir si no tenía una cierta capacidad de que iba a desarrollar bien los estudios. Los sistemas de becas son exigentes, no se puede becar a alguien que no vaya a dar buen resultado, porque cuesta dinero y el dinero es escaso. Hay que procurar que los candidatos colegiales en Huesca fuesen de un nivel académico. Por eso Huesca ha dado tantos maestros. Al ser las rentas pobres, había exámenes previos y se garantizaba que iban a aprovechar los estudios. Nada sería el claustro de profesores si los alumnos eran mediocres".

Más de 50 catedráticos en la Universidad para una orden que no ha sido "intelectual. No nace con la pretensión de tener grandes profesores ni copar los puestos de las universidades. No somos como los dominicos o los jesuitas después. Es una orden muy activa, pero la redención de cautivos exigía una preparación cultural buena. Tenían que saber las lenguas árabes, porque tenían que negociar, y economía porque lo que se recibe son limosnas, pero el dinero no se puede exportar, el rey no lo permitía. Había que transformarlo en mercancías, comprar bienes exportables. Cuando se llegaba a morería, berbería, el norte de África, había que cambiar esos bienes que pudieran ser aceptados. Y una vez convertido en dinero, comprar los cautivos. Había tres negocios y no podía ir el más torpe. Los grandes redentores como el caso de Juan de Molina son maestros en artes, decretos... No puede ir el más tonto del convento, porque no habla idiomas y no sabe comerciar. Por eso van los doctorados de distintos grados, siempre bien preparados". El primer colegio es Salamanca y después Huesca, donde se forman los redentores. De hecho, el de Barcelona, el de Valencia y el de Zaragoza se llamarán San Pedro Nolasco pero no alcanzarán nunca el nivel del colegio de la Merced de Huesca".

"A veces también es verdad que la administración no es acogedora cuando se le plantea alguna otra solución". Ha apelado al convento de San Lázaro de Zaragoza. "A nosotros, a los frailes de Aragón siempre nos ha gustado vivir en conventos viejos, antiguos, no hacernos uno nuevo. Por eso se pidió volver a San Lázaro, al otro lado del Pilar... De administración a administración hasta que lo derribó. No sé si lo hubiéramos podido restaurarlo, pero algo quedaría, más que las cuatro piedras del claustro. No hay que cejar en el ánimo, pero a veces la administración hace oídos sordos a los movimientos que a lo mejor te pueden sacar del atolladero. Al final, para tirar todo. Si hubieran hecho de San Lázaro un gran edificio, pero al final para tirarlo todo y no dejar más que un balcón para asomarte al Ebro, seguiría estando el convento de San Lázaro del siglo XIII. Pero no hay que desanimarse. La pelea del patrimonio es de todos los días y en busca del bien común. Nosotros como mercedarios estamos muy orgullosos de este redescubrimiento del convento de la ciudad de Huesca, con esas fotografías de Ricardo Compairé. Pero ahora, cuando lo ves, es cuando más pena te da. Cuando ves las máquinas por el solar, piensas que, aunque no estuviéramos los mercedarios, estaría el edificio". Ha expuesto como ejemplo la Diputación de Córdoba y su apuesta por la iglesia que rehizo totalmente. "Nunca hay nada perdido, todo se puede hacer uniendo fuerzas, ilusión y ganas. El patrimonio es algo vivo y va en la dirección en que la sociedad nos planteemos que vaya".

Manuel Anglés ha visitado el Claustro de la Merced para "ver así a un gran catedrático de la Universidad, rector del Colegio de la Merced, fundador de la Escuela de Cristo, lleno de fe y espiritualidad, que se movió en los círculos de la intelectualidad. Y logró que en el Convento de la Merced el general dejase su biblioteca, que Lastanosa dejase su colección de monedas... No estamos hablando de cualquier cosa, sino de un convento de unos frailes que sin ser de vocación intelectual supieron insertarse en la vida cultural de Huesca. El padre Abbad no era de Huesca, ni Molina era de Huesca. Venían, estudiaron y se enamoraron de Huesca. Algo tendrá Huesca cuando frailes de otros lugares estudiaban aquí y se quedaban como correctores y catedráticos de la universidad".

La jornada ha sido introducida por Francisco Javier Moreno, presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos Osca XXI. "Venimos trabajando y nos interesa tener en cuenta lo que tiene que ver con nuestro patrimonio, cultura, historia, y nos conviene rodearnos de los profesionales que saben. Empezamos a colaborar con Studiosi y formamos parte de la Plataforma de Defensa del Patrimonio de Huesca, con el edificio de la calle San Jorge, el Seminario, la plaza de San Pedro..."


 

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