Multitud de barbastrenses y visitantes se han reunido este mediodía en la plaza del Mercado de Barbastro para recoger las caretas y candelas bendecidas que reparte el Ayuntamiento a través de los integrantes del Grupo Tradiciones en la Feria de la Candelera.
A las 12 horas ya se había formado una larga cola ante el altillo donde se estaban organizando entre un gran trajín las 3.500 caretas y 7.000 candelas recién llegadas de ser bendecidas en la Catedral para proceder al reparto, una tradición que no perdonan los barbastrenses y a la que se apuntan multitud de visitantes.
María Jesús Sampietro, del Grupo Tradiciones, recordó la importancia de esta feria en Barbastro, las más antigua de Aragón, y que se mantuvo durante la pandemia. “Se celebra con muchísima ilusión, para Barbastro es un día muy grande”, el 2 de febrero, “día de la luz, que es la vida, simbolizada en la vela” que reparten a vecinos y visitantes.
“Además, su cercanía al carnaval, cuando la gente se ponía caretas” es de donde procede esta tradición. “Toda la gente de la comarca bajaba y mi padre nunca venía a casa sin una careta para nosotros”, recuerda.
El Grupo Tradiciones, fundando por Elita Davias, comenzó hace treinta años a colocarse sus atuendos tradicionales para repartir las caretas y las candelas que llevaban a bendecir en la iglesia. “Desde entonces estamos donde nos ubica el Ayuntamiento repartiéndolas hasta que se terminan, toda la mañana, y estamos muy orgullosos de poder venir”, destaca.
Así, la careta la disfrutan los niños y las candelas “tienen mucho significado porque está bendecida y yo soy la primera que creo que -dice Sampietro- si viene una tormenta con pedregada enciendes la vela con devoción y se corta en seco, o cuando hay cuestiones médicas o los hijos tienen los exámenes negros…”.
“Nos encanta que vengan también la gente de fuera y que se pueda disfrutar este día que es muy especial en este pueblo”, ha concluido.