Más de un centenar de personas se ha manifestado este miércoles en Huesca con el lema “No a la tala, Huesca se planta”, convocados por la Plataforma Árboles Vivos, creada tras el apeo de árboles en la avenida Martínez de Velasco. Han trasladado que están cansados de que “la ciudad se transforme a espaldas de la ciudadanía”, y reclaman una ordenanza municipal de protección del arbolado, transparencia real en los proyectos urbanísticos y un urbanismo sostenible que priorice las zonas verdes y el bienestar ciudadano.
Los manifestantes han portado pancartas con mensajes como “Huesca verde, verde, verde”, “Vida”, “Menos hormigón, más vegetación” o “Huesca verde, Huesca fuerte”. Han realizado el recorrido ente el cruce donde se llevó a cabo la tala de dos grandes plátanos, muy protestada por los vecinos, y ha recorrido la avenida Martínez de Velasco, donde también se han eliminado 18 plátanos, para desembocar la plaza de Navarra. Abría el recorrido una performance en la que una docena de personas vestidas de rojo escenificaron el dolor por la pérdida de los árboles.
Durante el trayecto se corearon consignas como “Nos han mentido, no a la tala”, “Queremos Huesca verde”, “Están talando nuestro futuro” o “Más vegetación, menos hormigón”.
En la plaza de Navarra se ha dado lectura a un manifiesto en el que la Plataforma Árboles Vivos ha denunciado que lo sucedido en Martínez de Velasco "no es un hecho aislado, es el reflejo de un modelo urbanístico que privilegia al cemento sobre la vida. Nos han engañado, nos hablan de progreso mientras destruyen nuestro patrimonio natural”, han señalado.
Han criticado que ante las protestas vecinales la respuesta fue “la represión policial”. "Nos trataron como si fuésemos extraños en nuestra propia ciudad", han agregado. También han subrayado el valor de los plataneros desaparecidos: “Cada árbol talado es una herida en nuestra historia. Estos plataneros que han crecido con nosotros durante décadas eran los verdaderos pulmones de Huesca. Nos regalaban sombra, aire limpio y frescor. Ninguna rotonda puede sustituir eso. El Ayuntamiento pretende maquillarlo prometiendo nuevos árboles, pero no aceptamos esta falacia. Un palo joven no puede reemplazar la grandeza de un árbol centenario".
Como han lanzando, "el patrimonio natural no se reemplaza con promesas. Estamos cansadas de un urbanismo obsoleto que sacrifica jardines y árboles para levantar rotondas y proyectos faraónicos. Queremos una ciudad pensada para las personas, para los peatones y las bicicletas, no para los coches ni para los intereses privados".
La Plataforma Árboles Vivos se define como un movimiento ciudadano apartidista. "Queremos que nuestra voz sea el eco de los árboles que ya no están y que sirva para impedir futuros arboricidios. No queremos atarnos a ningún partido político institucional. Estamos cansadas de que la ciudad se transforme a espaldas de la ciudadanía, de que votar cada cuatro años se utilice como cheque en blanco para imponer proyectos millonarios que no tienen nada que ver con nuestro bienestar".
Han señalado otras actuaciones ejecutadas en distintos barrios de Huesca "sin información, sin participación y sin transparencia. No queremos más decisiones tomadas en despachos cerrados", han señalado.
La plataforma Árboles Vivos Huesca quiere "influir en las políticas urbanísticas de nuestra ciudad", pero también aspira a "extender esta lucha a otros pueblos y ciudades de la provincia y de Aragón", por lo que se han solidarizado con las luchas en Torrero por los pinares de Venecia, contra el Oroel Park, el telecabina y las plantas de baterías en el Pirineo.
Los manifestantes han exigido una ordenanza municipal de protección del arbolado que garantice la seguridad legal de nuestros árboles. En segundo lugar, transparencia real para que los proyectos urbanísticos se presenten con claridad y se puedan debatir y alegar en tiempo y forma. Además, un urbanismo sostenible que priorice las zonas verdes y el bienestar ciudadano frente al beneficio privado. Y, por último, que Huesca se adhiera a la red de ciudades contra el cambio climático y que elabore un plan de futuro para combatir sus efectos desde el urbanismo.
También han invitado a todas las asociaciones de vecinos, colectivos ciudadanos "y cada persona que ama Huesca" a unirse a la plataforma Árboles Vivos Huesca. "Si nos organizamos, podemos construir una red sólida que exija transparencia, respeto al entorno y un futuro más justo y sostenible. No vamos a rendirnos porque defender nuestros árboles es defender la vida, la nuestra y la de las generaciones venideras. La ciudad para quien la habita, no a la tala, sí a la vida", ha concluido la lectura del manifiesto, entre aplausos.